En la madrugada del jueves al viernes nuestra pequeña localidad fue nuevamente visitada por los amigos de lo ajeno. Repitieron con el Bar Caro “45 años sin robos y en 2 años han entrado 2 veces”, nos comenta su propietario. Accedieron al local por la puerta que da al aparcamiento, robando la recaudación de las tragaperras. También pasaron por el Kiosco de Manolo abriendo la puerta de la cochera que da a la calle principal. En ambos casos reventaron las cerraduras dejándolas como muestra la foto. La aparición de estos sucesos ha sido sólo cuestión de tiempo en una pedanía antequerana que, al no contar con una policía municipal estable, tiene unas condiciones de seguridad muy deficientes.
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